Seguramente has escuchado historias de que algunos perros se mostraron sumamente sensibles cuando otro perro (o gato) con el cual vivían murió. O de perros que pasan por verdaderas depresiones (o incluso mueren) luego de que sus dueños fallecen.
Pero, ¿a qué se debe esto? ¿Solo se trata de perros muy sensibles o en realidad los perros son capaces de pasar por periodos de luto al igual que nos sucede a los humanos?
La realidad es que aún falta mucho por investigar sobre la forma en la que los perros perciben la muerte, tanto de los humanos como de otros animales, pero en general existen dos teorías sobre la forma en la que los perros sienten la muerte.
Algunos teóricos afirman que sí, que los perros son capaces de darse cuenta cuando alguien de su familia (ya sea animal o humana) ha muerto y, por lo tanto, sienten mucha tristeza por la pérdida, es decir, pasan por un periodo de duelo que puede ser variable. Algunos perros simplemente lloran cuando se dan cuenta de la falta de presencia de su ser querido, otros lo buscan sin parar, otros se rehusan a comer o beber agua y otros incluso pueden esperar a que regresen junto a la puerta o quedarse junto a la que era su cama, por citar solo algunos ejemplos.
Por otra parte, hay quienes aseguran que los perros no tienen las capacidades cognitivas para entender la muerte como un evento permanente. Recordemos que, de acuerdo con diversos estudios, se ha llegado a la conclusión de que la mente de un perro es similar en muchos sentidos a la de un niño de dos años o dos años y medio, aproximadamente. Los niños a esta edad tampoco logran entender por completo el fenómeno de la muerte como tal.
En este caso se cree que más bien entran en depresión porque, como ya hemos comentado anteriormente, son todos unos expertos en leer el lenguaje no verbal de las personas, así que más bien ellos se dan cuenta de que sus dueños están tristes y ellos de alguna forma crean empatía.
Sea cual sea la razón, lo que es un hecho es que muchos perros la pasan bastante mal cuando pierden a un hermano perruno o a sus dueños, así que no eches en saco roto las señales que te da de que está triste o deprimido. Apapáchalo, dale soporte emocional, tenle paciencia y en la medida de lo posible ayúdale a seguir con su rutina para que este cambio no sea tan severo para él.
Por supuesto, si sientes que está pasando por un periodo de depresión crónica, no dudes en acudir con tu veterinario de confianza para que lo evalúe.
[Fuentes: PsychologyToday.com, CesarsWay.com, QuickAndDirtyTips.com] [Foto: "Creative Commons Sad Dusty" by ian munroe licensed under CC BY 2.0]
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