Por más extraño que suene, actualmente va tomando auge salir a pasear con tu gato por el parque con el uso de una correa especial, no es imposible, sólo tienes que entrenar al gato por varios meses para que no se ponga agresivo y listo, puedes llevarlo contigo a todas partes.
Te compartimos unos sencillos pasos para lograrlo, recuerda que debes ser paciente con tu mascota, ya que no será fácil, pero vale la pena el esfuerzo. Sólo necesitas un arnés, una correa para gato, golosinas y mucha paciencia, debido a su independencia pueden tardar cierto tiempo en acostumbrarse.
Paso 1- Usa un pequeño arnés que se ajuste al gato, y una correa para gato que sea de algodón o nylon. El arnés se puede ajustar al tamaño de tu minino si pones un dedo entre el gato y el arnés, logrando adecuarse a la medida de tu gato.
Paso 2- Hay que acostumbrar al gato a llevar el arnés, puedes ponérselo mientras está en sus momentos de juego, que es en donde es más probable que se encuentre relajado, haz que use el arnés sin cerrarlo, es simplemente para que le vaya perdiendo el miedo. No lo obligues si ves que se pone de mal humor.
Paso 3- Recompensa a tu felino con un montón de golosinas y afecto. Acaricia a tu mascota durante las sesiones de entrenamiento esto le ayudará a poder asociar el arnés con sentimientos positivos.
Paso 4- Continúa poniendo el arnés a tu gato cada día hasta que logres que tu felino lo ignore completamente, después puedes ir ajustando un poco el arnés para que se vaya acostumbrando, hazlo por periodos cortos de tiempo.
Paso 5- El proceso de que nuestro gato se acostumbre a usar el arnés ya ajustado a su cuerpo puede durar varios meses, una vez que lo haya logrado deja que camine con el arnés puesto.
Paso 6- Agrega la correa cuando el gato se sienta cómodo con el arnés, déjalo que camine con la correa puesta por el tiempo que tarde en acostumbrarse a ella.
Paso 7- Practicar haciendo caminatas dentro de la casa por unos días, esto logra que el minino se sienta relajado, tendrá más confianza para salir a la calle.
Paso 8- Salimos de paseo cuando el gato esté acostumbrado a que tú sostengas la correa, deja que él te guíe en los primeros pasos, lleva golosinas a lo largo del paseo para animarlo, asegúrate que esté tranquilo afuera cuando salgan a caminar ya que no queremos que el gato se asuste.
Paso 9- Tira un poco de la correa para guiar al gato en paseos posteriores.
Paso 10- Sé paciente, enseñar a nuestro gato a caminar con una correa lleva tiempo, toma el proceso de entrenamiento día a día sólo cuando tu gato esté listo.