Uno de los aspectos básicos de la socialización del cachorro es acostumbrarlo a que debe permitir que su familia humana lo manipule y acaricie por todo el cuerpo. Además, familiarizarlo con ruidos, objetos y situaciones a las que se enfrentará cuando sea adulto.
El ejemplo lo daré con ruidos, pero el procedimiento es el mismo para todo lo mencionado. Para familiarizarlo, hay que buscar un ruido que no le cause pánico al perro, se trata de enfrentarlo poco a poco al ruido más fuerte. Los pasos son secuenciados, no simultáneos. Primero hay que hacer el ruido, inmediatamente después premiar al perro (antes de que el perro tenga una reacción). Aquí puedes ver el ejemplo y debes usar premios muy apetitosos.
Si tienes que mantener a tu perro quieto para limpiarle las orejas (usa toallitas como éstas), cepillarlo (recomendamos el Furminator), cortarle las uñas (usa uno especial, como este), hacerle alguna curación, etc. Pide ayuda a alguien, mientras la otra persona sostiene el Lickety Stik y tu perro lo saborea, tu podrás manipular a tu perro sin mayores problemas.
El secreto es que tu perro asocie esas experiencias a cosas positivas. Recuerda, una experiencia positiva es aquella donde el perro juega o come. Para lo mencionado aquí, se busca que el perro coma.
Mónica González, Ph.D., CPDT-KA
(Certified Professional Dog Trainer)
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